- Ganar como sea. Ese es el lema del presidente Sánchez, un hombre capaz de lo que sea y como sea para mantenerse en la poltrona más grande del Gobierno de España. Tanto le da pactar con un separatista como con un izquierdista de Podemos. Tanto le tiene dar una amnistía al señor fugado de Cataluña como amnistiar a todos los manifestantes del independentismo separatista de la comunidad autónoma catalana. Tanto le da abrazar a Pugidemont o abrazarse con el nacionalismo vasco del PNV, siempre de derechas, aunque nadie repare en ese dato.
- Con 179 votos a favor y 171 votos en contra Pedro Sánchez Pérez-Castejón fue investido Presidente de España una vez más. Se le veía feliz en su escaño. Sonreía. Los suyos también lo celebraban haciéndose fotos y riendo mucho. Se sentían en el PSOE candidatos y candidatas a algún ministerio, tras repartir con los socios de gobierno lo que haya que repartir.
- Donde no sonreían era en las bancadas de PP, Vox y UPN. Eran los del “no” a Sánchez, los que van a esas manifestaciones ante la sede del PSOE que están acabando todas las noches en trifulcas con la policía de las porras. Pero estos políticos de la derecha doliente de España no participan en la trifulca, entiéndase bien. Simplemente se pasan por la manifestación mientras la manifestación es una cosa festiva y familiar.
- Lo cierto es que había dos bandos. Me recordó la investidura a las dos Españas de siempre, pero con más nacionalistas que hacen su agosto en el mes de noviembre. En aquel Congreso de los Diputados dividido por la mitad nadie se planteaba la posibilidad de un gobierno de interés nacional entre un PSOE sin Sánchez y un PP sin Feijóo. Era un Congreso de los Diputados en el que había ganado el “como sea” del sonriente señor Sánchez.
- Lo siguiente es la jura del presidente, la jura de las ministras y ministros, empezar a cumplir lo pactado con los nacionalistas del noreste y del norte, seguir subvencionando algo la pobreza de todo el Estado para que las masas descontentas no salgan a las calles.
- No se consuela el que no quiere. Mucha gente estará mirando las medidas anunciadas por el Gobierno Sánchez para ver lo que le toca. Si eres parad@ tendrás transporte público gratuito. Menos da una piedra. Pero mejor sería tener trabajo para tener un salario digno que te permitiera pagar tus gastos olvidándote de las dádivas del gobierno de turno.
- Señalo la medida del transporte gratuito para niños, jóvenes y desempleados porque es la más efectiva. A partir del 1 de enero se pone en marcha. Hablar de ayudas para hipotecados, un ingreso vital más fácil de conseguir o esas 183.000 viviendas públicas de alquiler asequible es como hablar de la pedrea de la lotería de Navidad. ¿A quiénes les tocará la lotería de las ayudas con nombre y apellidos? No a todos los que las necesitan.
- En todo caso, estas medidas para calmar nuestros estómagos no nos deben hacer olvidar que el presidente Sánchez va a hacer pipí sobre la Constitución española con el incumplimiento más grave de nuestra democracia: incumple el artículo 14 de la CE para dejar en libertad a Puigdemont con una amnistía vergonzosa.
- Por eso en la Asociación española por la Igualdad de género “Genus Aequalitatem” manifestamos nuestro rechazo a un Gobierno que no nos parece que cumpla la principal ley del Estado español, la ley de leyes, la Constitución española.