- El Gobierno, con independencia de su color, siempre dice que España va bien. José María Aznar lo dijo en su día sin tapujos. Eran otros tiempos y era otro color político el predominante en la bancada del Congreso de los Diputados. La derecha de Aznar era una derecha primitiva en sus formas.
- En cambio, la izquierda, o lo que sea este Gobierno de Pedro Sánchez, va más a mirar las cifras macroeconómicas que le convienen. Se aferra a un dato económico para decir España va bien sin pronunciar la frase que acuñó Aznar. Así se fija el Gobierno de Sánchez en que España es el país de la Unión Europea que más va a crecer en el año 2024. Es una forma de decir que España va bien cuando España no va bien para todos.
- Por ejemplo, España no va nada bien para la juventud. Lo dicen los datos que tanto gusta mirar al Gobierno cuando le son favorables y que ignoran cuando no dejan quedar bien la gestión del ejecutivo.
- Dicen estos datos desfavorables para la juventud española:
- -El 29 % de los menores de 18 años se encuentran en situación de riesgo de pobreza.
- -El 28 % de los jóvenes está en situación de desempleo.
- La pobreza, pues, existe en nuestro país de manera preocupante. De cada diez jóvenes españoles menores de edad, tres son pobres o están a punto de serlo. Es fácil imaginar las causas: el paro de sus progenitores o los trabajos mal pagados y precarios que traen sus madres y padres a sus casas.
- Estos jóvenes tampoco están mejor cuando tienen edad para trabajar. Volvemos a aproximarnos a esos tres de cada diez jóvenes en situación de desempleo, es decir, también en riesgo de pobreza. Padre pobre, hijo pobre. Madre pobre, hija pobre. La pobreza parece hereditaria. Se pregunta una si no había un ascensor social que se llamaba educación. Parece que ese ascensor no funciona. Parece que el ascensor (la educación) que decían que nos sacaba de la pobreza está parado y sin arreglo posible por parte de un Gobierno que sólo piensa en arreglar sus poltronas para los próximos cuatro años.
- Justo por esa despreocupación de Pedro Sánchez y de sus ministras y ministros por los problemas económicos de la gente de a pie resulta más grave la situación de la población juvenil que está camino de la pobreza o ya está en la pobreza. No hay un gobierno que esté buscando soluciones a la falta de recursos económicos de buena parte de la juventud española.
- El gobierno de Pedro Sánchez, salido del pacto con el exiliado señor Puigdemont, pierde su tiempo contentando a los nacionalistas separatistas catalanes. Vendido por un plato de lentejas, este inquilino de la Moncloa promete pasar la presente legislatura dando y dando y dando a los catalanes, pero no dando lo suyo sino dando lo nuestro, lo de todos los españoles; también lo de los adolescentes que están viviendo en sus casas la precariedad y la escasez económica.
- La Asociación española por la Igualdad de género «Genus Aequalitatem» se solidariza con los jóvenes que están viviendo una situación de desempleo. Comprendemos que resulta muy duro no tener un empleo que conlleve un salario y una seguridad social para sentirnos integrados en la sociedad y poder financiar nuestras necesidades de todo tipo. También resulta muy duro que las madres y padres de esos jóvenes y ellos mismos tengan trabajos tan precarios que no les lleguen sus ingresos para hacer frente a sus gastos. Es la nueva pobreza: los pobres que trabajan.
- Exigimos, pues, al gobierno del señor Sánchez soluciones para la pobreza juvenil. Le decimos a Pedro Sánchez que es una vergüenza que un gobierno socialista esté contribuyendo con su desgobierno a que el 28% de los jóvenes estén desempleados.