• Allá donde fueres haz lo que vieres. Fue esta máxima la que ha aplicado la Princesa Leonor a su dieta. Ha pasado de ser una joven que comía un menú sano a ser una alumna de academias militares que come comida rápida. Incluso hay quien dice que la heredera del trono de España ha empezado a hacer sus pinitos con las bebidas alcohólicas.
  • Seguro que la reina doña Letizia está preocupada con el cambio de alimentación de su hija mayor. Leonor tiene tendencia a engordar. Un menú de pizzas y hamburguesas puede hacerse notar en la báscula. Y de la bebida es mejor no hablar dados los antecedentes familiares en la familia Borbón.
  • Sin ir demasiado lejos, sabemos que a don Juan Carlos le gusta la bebida fuerte. Tiene a quien parecerse: su madre, doña María, «se bebía las fuentes del Nilo» en palabras de su suegra, la reina Victoria Eugenia.
  • No deseamos que la princesa Leonor siga el camino de sus ancestros bebedores. Tampoco deseamos que se deje llevar por el insano placer del tabaco. Es sabido que el rey Alfonso XIII fue uno de los mejores clientes de Tabacalera. Su vicio lo llevó a la tumba a edad temprana.
  • Afortunadamente, Leonor tiene a su lado a su madre. La reina Letizia es demasiado perfecta como para permitir una dieta grasienta a la heredera. Sabemos que siempre se ha preocupado porque sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, llevaran una alimentación sana. Incluso llegó sugerir en los centros escolares menús con productos de temporada.
  • Esperamos que doña Letizia consiga modificar para mejor los ranchos del ejército español. Serían muchos los militares, hombres y mujeres, que se beneficiarían con menús con mayor presencia de legumbres, pescado, carnes blancas, fruta y aceite de oliva.
  • ¿Qué se está comiendo en los comedores de los cuarteles del ejército español? La dieta de los cuarteles y academias del ejército español ha mejorado significativamente a lo largo de los años. Actualmente, se basa en raciones de combate que están diseñadas para ser equilibradas nutricionalmente y energéticas. Estas raciones incluyen desayuno, comida y cena, y están formuladas para proporcionar aproximadamente 3500-4000 kcal por día.
  • Algunos de los alimentos incluidos en estas raciones son cereales de desayuno, sopas instantáneas, judías con chorizo, sardinas y otros productos que aseguran un aporte adecuado de macronutrientes y micronutrientes.
  • Además, se busca que la comida sea sabrosa para mantener el ánimo y la capacidad de alerta de los soldados. Por eso les dan tanto chorizo. Tú piensas en el chorizo picante y te vienes arriba, te animas. Un pan con chorizo da mucha alegría. Después de una merienda choricera vas al gimnasio a entrenarte como si estuvieras preparándote para las Olimpiadas. ¡Menuda alegría lleva tu cuerpo! Por eso nuestra princesa Leonor sale más sonriente en las fotos desde que anda por las academias militares de alumna uniformada.
  • Las sopas instantáneas son muy prácticas para el personal de cocina. Se trata de ponerlas en los cuencos y echarles agua caliente encima. Esperas unos minutos y ¡para dentro sopa! Son sopas con un toque de picante. Más alegría para los cuerpos serranos. Seguro que Leonor aprecia mucho las sopas instantáneas, cansada como estaba de tanta sopa de acelgas hirviendo. ¿Quién no recuerda aquel video de la vida familiar en la Nueva Zarzuela en el que se veía a una niña Leonor quemándose con la sopa?…
  • Yo creo que Leonor no vuelve a casa. Esta chica se nos queda en los ejércitos de España para toda la vida. Se echará un novio soldado, se casará con él, tendrá hijas e hijos y serán todos militares. Vamos a tener la reina más militarizada de la Historia de España, si España sigue existiendo como Reino y no se nos vuelve Tercera República.
  • Pero volvamos a la dieta. En general, la dieta del ejército español se considera saludable por los nutricionistas del Estado y está diseñada para cubrir las necesidades energéticas y nutricionales de los soldados, especialmente en condiciones de campaña y combate.
  • En la Asociación española por la Igualdad de género «Genus Aequalitatem» no recomendamos la dieta de los ejércitos de esta España nuestra. Demasiado colesterol. Demasiada grasa. Unos años comiendo tanto chorizo y tantos huevos suponen una menor esperanza de vida a largo plazo.
  • No, Alteza, no coma eso. Deje el chorizo en el plato, aunque esté rico y no coma sopas instantáneas. Hágalo por usted. Hágalo porque sería horrible que acabara siendo la Princesa del Colesterol. Doña Letizia no se lo iba a perdonar. Recuerde, Alteza, que su madre la enseñó a comer sopitas sanas y calentitas.

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