• El Ministerio de Educación quiere prohibir el móvil en primaria y en la ESO para contentar a las familias. Padres y madres no saben qué hacer con el niño o niña que recibe un móvil como regalo de su Primera Comunión y se va enganchando.
  • En España el 94% de los niños y niñas de 14 años tienen un móvil en sus manos. Son muchos. Muchísimos. Han ido sumando un país nuevo enganchado a las batallitas que les hacen perder el disfrute de la realidad. Ya no se ven niños y niñas jugando en lo patios de los colegios con balones. O no se ven tantos. Se ven pantallas y más pantallas con cabecitas inclinadas sobre ellas a la hora del recreo, a la salida de clase, en las aulas.
  • Se hacen estudios del fenómeno. Hay conclusiones para todos los gustos, pero todos alertan de influencias perversas en la juventud. Leen peor, entienden menos y hasta dicen que se les están quedando las caras sin expresión porque expresan sus emociones con emoticones en las pantallas.
  • La ministra Pilar Alegría ha decidido arreglar el problema. Se reúne con las comunidades autónomas para sacar medidas comunes. Se trata de que los alumnos y alumnas de primaria y secundaria dejen sus teléfonos móviles en sus casas y vayan a los centros escolares centrados en sus estudios. Los móviles inteligentes quedarían para hacer determinadas tareas escolares a elección del docente de turno.
  • Todavía no se atreven nuestros políticos a plantear una educación libre de nuevas tecnologías porque, además, no es el caso. Pero las modas también afectan a la educación. Estamos pasando de la digitalización de la enseñanza a una enseñanza, otra vez, más de encerado. Estamos, pues, volviendo a las clases de apuntes al eliminar la posibilidad de que el alumno le quite una foto al contenido del encerado.
  • En la Asociación española por la Igualdad de género «Genus Aequalitatem» creemos que es necesario eliminar los móviles de las aulas. Los progenitores de los chavales debe implicarse más en el uso correcto de estos pequeños aparatos.
  • No debemos olvidar que los expertos recomiendan que los niños y niñas estrenen con 13 años su primer teléfono móvil, la edad de entrada en las Redes Sociales. Pero un niño/a de 13 años ya ha alcanzado la condición de experto/a en uso de smartphones. Muchos han iniciado su carrera de expertos jugando con el móvil del padre o de la madre antes de echarse a andar.
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