• Nadie diría hace treinta años que en el trono de Reino Unido estaría sentada como reina consorte reinante Camila Parker Bowles, la mujer más odiada del reino, la rival de la Princesa Diana de Gales, la otra. Pero así ha sido. El tiempo, más que dar razones, ha quitado razones.
  • El tiempo y el azar. Parece que desde que la reina Isabel II le dijo adiós a este mundo las enfermedades se han cebado con los miembros de la realeza británica. A los cánceres sufridos por Sarah Ferguson, se suma la extraña enfermedad de la actual Princesa de Gales y el cáncer del Rey Carlos III.
  • La Reina Camilla, en su papel reinante, sigue adelante sin perder la sonrisa. Empieza a acudir sola a los actos oficiales llenando con su presencia la ausencia del monarca enfermo. Camilla es Camilla. Es de esas mujeres que pueden ir solas a los sitios porque son un todo andante. No necesitan compañero de vida, sino que el compañero de vida las necesita a ellas.
  • No sé si Camilla ganará adeptos, pero se está mostrando más profesional que los profesionales que le organizan la comunicación a la Casa Real británica. Así, cuando le preguntan por su marido, dice que «está muy bien dadas las circunstancias». Con una sencilla frase se aleja de las informaciones poco creíbles de palacio. Estar bien dadas las circunstancias es estar bien jodido.
  • En todo caso, no creo que Carlos de Inglaterra esté fastidiado por tener que dejar sus funciones de rey sine die. Al actual Carlos III el reinado le viene grande. Lo vimos desde el primer día. Y ya lo decía Lady Di en aquella famosa entrevista televisada tras su divorcio del heredero Carlos.
  • No sabemos qué grande le vendrá el reinado al hijo, al actual heredero. El príncipe Guillermo se ve demasiado apesadumbrado. Por un lado, tiene a la esposa enferma. Por otro lado, el padre se le pone enfermo. Guillermo es un heredero al que parece que se le va a caer la corona encima en cualquier momento y empieza a ser una alteza triste.
  • Yo creo que el príncipe Guillermo hubiera querido estar en el sitio de su hermano Harry. Se sentiría más feliz casado con una actriz y viviendo en California con dos niños que no salen en la prensa. Pero está en la vieja Gran Bretaña, en el país del Brexit, esperando su turno para reinar.
  • Dios salve a la reina, dice el himno de Gran Bretaña. Dios salve al rey. El futuro de la monarquía británica nunca fue tan incierto. Muchos se preguntan si estamos en el reinado más breve de la historia británica. Un rey enfermo, una reina consorte anciana, un príncipe heredero abrumado, una princesa heredera consorte en un post operatorio…, hacen prever más que un reinado breve un reinado triste alargado en el tiempo.
  • Desde la Asociación española por la Igualdad de género «Genus Aequalitatem» le deseamos una pronta recuperación al Rey Carlos III y también deseamos el pronto restablecimiento a su nuera la princesa Catherine. Afortunadamente, tienen a su disposición al mejor personal sanitario y los mejores hospitales. Ojalá todas las enfermas y enfermos tuvieran los mismos medios a su alcance.

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