- ¿Dónde está Letizia tras el motín de Paiporta? Esta pregunta se la hacen muchos y muchas periodistas, deseosos de darle más portadas a la mujer de Felipe VI. Letizia está desparecida en combate. No sabemos si tuvo una discusión de matrimonio y desapareció enfadada con su marido o si su desaparición de los focos se debe a un pacto entre esposos.
- Podría pensarse que Felipe de Borbón y Grecia decidió hacerse cargo de las culpas que le tocan por la gestión de la DANA sin que esas culpas salpiquen al resto de la Casa Real. Así, envió a su madre a Nueva York y apartó a doña Letizia de las portadas escondiéndola en las comodidades de los palacios de La Zarzuela. El monarca no se tomó nada bien que no hubiera gente aplaudiéndolos en Valencia.
- Posiblemente sigan sin lloverles los aplausos a los miembros de la Familia Real en su siguiente visita a Valencia, donde de 78 municipios hay 72 municipios afectados por la devastación de la DANA. ¿Cómo van a aplaudir a los Reyes de España cuando la única ayuda que tienen muchos damnificados es la ayuda de las voluntarias y voluntarios? El Estado español en Valencia es un Estado fallido.
- Tanto los políticos como la Casa Real se están riendo de todos nosotros porque todas y todos somos Valencia. Todas y todos podríamos ser la madre que ve morir a sus hijos arrastrado por las aguas desatadas. Todos y todas somos el padre que ve como el agua se lleva a su mujer y a su bebé. Todas y todos somos la mujer que recibe la llamada desesperada de su pareja antes de ser arrastrada por la riada. Todas y todos somos las personas que llamaron para pedir ayuda al 112 y no recibieron contestación a sus llamadas de SOS.
- Mientras la DANA arrasaba vidas, casas, carreteras, caminos, puentes, coches, … los políticos estaban a lo suyo. Carlos Mazón, el presidente de la Generalitat valenciana, disfrutaba de una larguísima comida con una guapa periodista. Pedro Sánchez decía eso de «si necesitan ayuda que la pidan». Los consejeros y consejeras de la Generalitat buscaban al jefe (al de la comida con la periodista). Las ministras y ministros de Sánchez no se querían enterar de nada. El ejército estaba en sus cuarteles. Los Reyes estaban en su bonito palacio del complejo de La Zarzuela. La niña Leonor, ya mayor de edad, seguía con sus clases de marinerita en Marín. Su hermana estaba en Gales enamorando a algún pijo del colegio caro que le pagan nuestros impuestos. Doña Sofía, la reina emérita, tampoco se enteraba de las lluvias torrenciales en Valencia. De don Juan Carlos ya no decimos nada porque anda por Abu Dabi ganado más comisiones con los árabes.
- Visto lo visto, ves que no hay nada. Solo eres tú y la gente como tú. Los políticos no están para ayudar a la ciudadanía. La Casa Real tampoco. El ejército se ha convertido en los soldaditos de plomo con los que jugamos las niñas y niños, ahora con la soldadita Leonor incorporada a la tropa. Nunca hubo más glamour y menos eficacia en los ejércitos de las Españas.
- A los desencantados con este Estado de Derecho convertido en el Estado bananero de la Península Ibérica, todavía conservamos una esperanza: que doña Letizia le haya reñido a Felipe VI por no haber sabido ser Rey de España y haberse convertido en el Rey de Pedro Sánchez. Por no haber sabido, don Felipe, arbitrar los poderes del Estado en una respuesta rápida a la DANA desatada.
- Volverán a Valencia y volveremos a ver más barro, más gritos, más golpes en los coches oficiales. Por eso dicen que irá solo Felipe. ¿Y sabéis cuándo irá? Cuando su equipo de Zarzuela le prepare un pasillo de palmeros para que le den una música de aplausos que le dejen contentas las orejas.
- En la Asociación española por la Igualdad de género «Genus Aequalitatem» queremos mostraros con todos nuestros escritos en nuestra página web y en nuestras redes sociales nuestro apoyo infinito a las víctimas. Vuestro dolor es nuestro dolor. Os apoyamos.
- También queremos mostrar nuestro reconocimiento a los muchos y muchas voluntari@s que estáis sobre el terreno ayudando. El voluntariado es el mejor motor para tirar para adelante.
- Los políticos de todos los colores y los Reyes de España son la administración fallida que podremos cambiar en las urnas. Démosle tiempo al tiempo… Pero no olvidemos exigir responsabilidades.